El canadiense que murió en un cuarto de una vivienda que alquilaba desde hace tres meses y que está ubicada en el barrio Juno Rodríguez de la ciudad de Estelí responde al nombre de Poter Malcol Thomas de 68 años de edad.
La casa que alquilaba es propiedad del señor Marvin Rodríguez Salinas quien señaló que no se explica las razones el por qué su asistente del hogar, un amigo canadiense y el abogado Rolando López Gámez no reportaron el caso a las autoridades ni se hayan preocupado por comprarle un ataúd.
Agregó que mientras los restos del canadiense Poter Malcol Thomas estaban expuestos sobre la cama, las personas antes citadas tomaban licor como si estuviesen celebrando su muerte y por ello llamaron a la Policía nacional la que a compañada de la médico forense Mirna Ortez.
La Médico Forense se abstuvo de examinar el cuerpo del canadiense al enterarse ya había sido manipulado por otro médico que lo asistía.
El abogado Rolando López reconoció que la víctima era su amigo el que después de jubilarse en su país decidió venir a Nicaragua donde lamentablemente murió de cáncer y desde que murió realizaron los trámites necesarios para cremarlo y enviar sus cenizas a su país natal.
Por su parte su asistente del hogar dijo que Poter Malcol Thomas murió en sus brazos dos días después de haberse complicado del cáncer que le afectó sus órganos vitales.
El hecho fue calificado como de muerte natural y a petición de sus familiares los restos del canadiense fueron trasladados a la funeraria Monte de Los Olivos de Managua para cremarlo y enviar sus cenizas a su país natal Canadá.
ISIDORA ACUÑA /RL
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