Existen grupos armados en la zona norte, principalmente entre Quilalí, el Jícaro y San Fernando.La policía y el ejército mienten al decir que no existen grupos armados con fines políticos en Nicaragua, manifestó Roberto Petray, presidente de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).
Petray expresó que, como representante de organismo de Derechos Humanos en este país centroamericano, ha recibido una serie de cartas y llamadas telefónicas de grupos de militares que demandan independencia de los poderes del estado, principalmente del Consejo Supremo Electoral al que no avalan por esta viciado económica y políticamente.
"Estos armados demandan despolitización de las instituciones del estado, pero que también se respete la voluntad del pueblo de decidir por el desarrollo de la nación y que, de no hacerse, actuarían en contra del Ejército y la Policía por avalar acciones en contra de la Constitución Política del país, expresó el representante de la ANPDH.
El funcionario de este mismo organismo ha denunciado desde el año 2010 la presencia de grupos armados en contra de las políticas gubernamentales del actual mandatario José Daniel Ortega, entre estos los comandados por YAHOB Y Pablo Negro, estos, muertos previo al proceso electoral presidencial en Nicaragua y a los que la Policía y Ejercito han tildado de "bandoleros" o "delincuentes comunes".
Este martes el funcionario volvió a afirmar que, efectivamente, existen grupos armados en la zona norte, principalmente entre Quilalí, el Jícaro y San Fernando, en el departamento de Nueva Segovia y entre estos figuran los remanentes de Yahob, Fuerza Armada Democrática 380 y Fuerza Armada 25 de junio 380, que operan en el sector de San Sebastián de Yalí.
Desde el 2007, monseñor Juan Abelardo Mata y la ANPDH han advertido a las autoridades sobre la presencia de grupos armados que no son simples delincuentes.
Petray asegura que cada vez existe menos seguridad en el campo porque el Ejército que anda rastreando a estos grupos comete supuestos atropellos entre poblaciones rurales, según las denuncias que el organismo ha recibido.
“El obispo (Mata) tiene referencias porque en cada municipio y en el área rural hay sacerdotes que tienen contacto con la población, además de que esos grupos armados han expuesto sus demandas ante el obispo quien ha tratado de persuadirlos para que desistan del camino de la violencia”, dijo el coordinador de la ANPDH.
Según Petray, algunos de estos grupos supuestamente han vertido amenazas de realizar actividades durante las elecciones por la inconformidad con el actual Consejo Supremo Electoral. La ANPDH se suma a la voz de la Iglesia para que la violencia no siga escalando.
Petray expresó que, como representante de organismo de Derechos Humanos en este país centroamericano, ha recibido una serie de cartas y llamadas telefónicas de grupos de militares que demandan independencia de los poderes del estado, principalmente del Consejo Supremo Electoral al que no avalan por esta viciado económica y políticamente.
"Estos armados demandan despolitización de las instituciones del estado, pero que también se respete la voluntad del pueblo de decidir por el desarrollo de la nación y que, de no hacerse, actuarían en contra del Ejército y la Policía por avalar acciones en contra de la Constitución Política del país, expresó el representante de la ANPDH.
El funcionario de este mismo organismo ha denunciado desde el año 2010 la presencia de grupos armados en contra de las políticas gubernamentales del actual mandatario José Daniel Ortega, entre estos los comandados por YAHOB Y Pablo Negro, estos, muertos previo al proceso electoral presidencial en Nicaragua y a los que la Policía y Ejercito han tildado de "bandoleros" o "delincuentes comunes".
Este martes el funcionario volvió a afirmar que, efectivamente, existen grupos armados en la zona norte, principalmente entre Quilalí, el Jícaro y San Fernando, en el departamento de Nueva Segovia y entre estos figuran los remanentes de Yahob, Fuerza Armada Democrática 380 y Fuerza Armada 25 de junio 380, que operan en el sector de San Sebastián de Yalí.
Desde el 2007, monseñor Juan Abelardo Mata y la ANPDH han advertido a las autoridades sobre la presencia de grupos armados que no son simples delincuentes.
Petray asegura que cada vez existe menos seguridad en el campo porque el Ejército que anda rastreando a estos grupos comete supuestos atropellos entre poblaciones rurales, según las denuncias que el organismo ha recibido.
“El obispo (Mata) tiene referencias porque en cada municipio y en el área rural hay sacerdotes que tienen contacto con la población, además de que esos grupos armados han expuesto sus demandas ante el obispo quien ha tratado de persuadirlos para que desistan del camino de la violencia”, dijo el coordinador de la ANPDH.
TRÁFICO DE ARMAS
Aseguró Petray que en Nicaragua se está registrando tráfico de armas y que posiblemente la Policía no vaya a decir que están intentando llegar hacia estos grupos irregulares. Mencionó que el caso más reciente son las 13 AK y el fusil M-16 que la Policía incautó en el bus de transporte El Segoviano. Otros fusiles fueron incautados en Sébaco, Palacagüina, y en Jalapa, Nueva Segovia, fueron ocupadas unas granadas, refirió el representante de ANPDH.Según Petray, algunos de estos grupos supuestamente han vertido amenazas de realizar actividades durante las elecciones por la inconformidad con el actual Consejo Supremo Electoral. La ANPDH se suma a la voz de la Iglesia para que la violencia no siga escalando.
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